Redes del mal
Parte 3
Franz Erdl
26 de enero
de 2013
Traducción:
10 de abril de 2013
La semana
pasada, ocurrieron tantas cosas negativas que apenas puedo mantener el hilo para
escribirlas todas. Muchos detalles se pierden porque no puedo recordar todo lo
que ocurre durante las sesiones. Todos esos detalles son muy interesantes, pero
tengo que limitar mis artículos a lo más importante, o no me quedaría ningún
tiempo libre, que me hace mucha falta.
También
quiero mencionar que mis clientes, que a veces tienen buenas capacidades de
percepción, han ayudado mucho para desvelar todo esto. Gracias.
Lo que me
causó un gran fastidio el viernes pasado fueron las interferencias en Internet.
Siempre he tenido interferencias y sin duda no son una coincidencia, pero el
viernes pasado mi Internet funcionó solamente unos segundos, así que tuve que
cancelar todas las sesiones. Me vi obligado a hacer algo al respecto, y lo
primero que comprobé era si había magia negra operando: ¡bingo! Encontré dos
magos negros que según parece tenían cada uno el encargo de molestarme. Los dos
magos tenían escudos protectores desde bases subterráneas; ni siquiera recuerdo
qué más había tras ellas. En cualquier caso, fueron dos horas más de trabajo,
pero desde entonces mi Internet funciona mejor que nunca.
Bases en
otras dimensiones
Cuando
descubrí las bases anunnaki, pensé que aquello era todo, finalmente. Pero esta
semana hubo que añadir bases de otras dimensiones. Todo lo que he mencionado
hasta ahora se desarrolla en nuestra dimensión. El nivel 3D, el nivel astral,
etc., todas en nuestra dimensión. Las otras dimensiones son algo completamente
diferente. No sé mucho más sobre ello, y tampoco importa demasiado, porque basta
con decir “base en otra dimensión” para establecer el contacto.
Así pues,
hay un gran número de campos de aislamiento y de interferencia que proceden de
estaciones en otras dimensiones. El trabajo es exactamente el mismo que el que
se realiza para las estaciones en otros planetas, pero deben tratarse de manera
separada. Quiero mencionar que las estaciones en otros planetas y en otras
dimensiones son más fáciles de destruir que las estaciones en la Tierra. Lo que
no existe en estas estaciones son humanos, serpientes y cabezas grandes. Si no
hay humanos, tampoco hay magos negros. Los humanos no pueden ser sanados tan
rápido como los extraterrestres. Las serpientes y los cabezas grandes tienen la
misión de absorber energía de la gente. Por lo tanto, no los encuentras en otro
lugar.
Entre las
bases en otras dimensiones, casi nunca había una segunda base protegiendo a la
primera. Hasta ahora, solo he tenido dos casos de quizá 50 estaciones en otras
dimensiones que tenían una estación de apoyo. Si una estación no tiene el escudo
protector de una segunda estación, es especialmente sencilla de destruir. Los
escudos internos son fáciles de disolver, ya sea sobre partes de la instalación
o sobre una instalación extraterrestre. ¿Acaso pensaban que nunca los íbamos a
encontrar?
Recuperación de fragmentos de alma cautivos
Sin embargo,
con mucha frecuencia podrías encontrar fragmentos de almas de humanos encerrados
en estas estaciones extradimensionales. Recuerda: una encarnación significa un
fragmento de alma. Para los extraterrestres, los humanos tenemos una muerte
traumática, y de esa forma pueden abducir ese fragmento de alma a alguna
estación y retenerlo allí. Los que son llevados a otras dimensiones son
probablemente los más difíciles de encontrar… Bueno, ¡ya no!
Desde que
hice ese descubrimiento, mi nuevo hobby es “la búsqueda de fragmentos de almas”.
Obviamente, nuestros enemigos se han tomado muchas molestias con los humanos a
los que quieren bloquear de manera particularmente poderosa. Los fragmentos de
alma de esas personas están especialmente diseminados en el universo lejano.
Pero los fragmentos no están flotando en el vacío del cosmos; todos ellos se
encuentran en instalaciones especiales, y estas pueden ser:
Bases en
otras dimensiones: muy frecuente.
Bases en
otros planetas: frecuente.
Bases
subterráneas: en ocasiones.
Pirámides:
raramente.
Estaciones
espaciales: raramente.
Edificaciones sobre la Tierra: una vez hasta ahora.
Pues bien,
el cuestionario es bastante simple. Primero, preguntas: “¿Hay algún fragmento de
alma encerrado en alguna parte?” Si la respuesta es “sí”, debes preguntar dónde
está. Después hay que comprobar toda la cadena de medidas de seguridad (a veces
eso puede ser muy complicado). Para las estaciones importantes, quizá se
sobrepasen las dos horas de trabajo.
También hay
que liberar a todas las almas cada vez, o de lo contrario el proceso se bloquea.
En la mayoría de las ocasiones, debe eliminarse un escudo protector antes de
poder acceder a las almas (o fragmentos). A continuación, hay que liberar a
todas las almas y sanarlas. Después pregunto si todas han sido liberadas. Si la
respuesta es “no”, podría ser necesario eliminar otro escudo protector antes de
poder llegar hasta las siguientes almas. Hasta ahora, he experimentado cuatro
fases de este tipo. Es algo así como descubrir un sótano tras otro, cada vez más
profundo.
Almas
compañeras
Como
resultado de que existan fragmentos de alma cautivos, las almas compañeras no
pueden encontrarse. Hoy por hoy, esta es mi interpretación de una alma
compañera: para los terrícolas son las parejas dragón que evolucionaron de
manera natural a partir del alma de la Tierra como macho y hembra. En otros
planetas, opino que son los primeros seres que se manifestaron por pares. La
conexión de dos compañeros de alma sin restricción alguna libera grandes
poderes; por esa razón, nuestros enemigos no dejan que nos encontremos.
Con la
derrota de los dragones, casi todas las parejas de almas de los terrícolas
fueron destruidas. Creo que la corta esperanza de vida, que los anunnaki han
programado en nosotros, tiene el fin de producir numerosos fragmentos de alma,
que pueden ser perfecta y fácilmente encerrados en las distintas instalaciones.
A propósito, nuestro fragmento dragón es claramente un fragmento de nuestra alma,
como son las otras vidas anteriores. Cada vida, cada fragmento continúa
existiendo. La generación de todas estas partes facilita enormemente nuestro
estado de fragmentación; la de cada alma, y la de las almas compañeras. Para las
razas extraterrestres es diferente y esto no funciona así; por eso pueden ser
sanadas más fácilmente.
Hace dos
semanas, pregunté a los anunnaki si estarían dispuestos a eliminar la energía de
separación entre Karin y yo, pero no hubo una respuesta clara. Para otra persona
obtuve la respuesta de que no era posible, y que sería necesaria aproximadamente
una semana para borrar la energía de separación de las dos almas compañeras.
Poco después, descubrí el problema de los fragmentos de alma retenidos en las
instalaciones, y que están principalmente en otras dimensiones. Entonces se me
hizo obvio que la separación solo llega a su fin cuando todos los fragmentos de
ambas almas son liberados. Mientras tanto, tengo todas las herramientas para
resolver este problema, y estoy seguro de que algunos anunnakis amistosos están
de nuestro lado y han ayudado discretamente. Pero todavía queda mucho trabajo
por hacer.
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